Pobre Verónica

La fui conociendo en la irrealidad
Comía tristeza cargada de paz
Regaba los frutos de la soledad
Y nunca la vi enojarse de mas

Veía las cosas de un modo distinto
Mentía y decía, no puedo crear
Dormía aturdida por miedo a pensar
Y nunca en la vida la vi despertar

Pobre Verónica era tan hermosa
Quien sabe por que se me fue
A vivir la vida de un pájaro atado
Habiendo aprendido a volar

Pobre Verónica era tan valiente
Quien sabe por que se escapo
Dejándome el gusto de un árbol caído
Habiéndome dado la flor

Nunca me gusto tanto el silencio
Que su voz me supo regalar
Nunca me gusto tanto la noche
Y se que nunca quiso hacerme mal

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